Nuestra pechuga de pavo, es originaria de Alemania. Está cocida sobre su hueso, para que permanezca jugosa. Posteriormente se deshuesa y se envasa al vacío. Piezas de 2,3 kg. No contiene prácticamente grasas. Fliteala finamente, o disfrútela en dados.
Esta pechuga de pavo conserva el tamaño, la forma y la textura de la pieza original: por eso, nunca hay dos iguales.
La creciente incorporación de la pechuga de pavo a nuestra dieta tiene sus razones: se trata de un alimento magro, fácil de digerir y con un bajo contenido en grasa y colesterol.
El aporte calórico es de menos de 130 Kcal/100 g de media, aspecto importante para quienes buscan una comida ligera y suculenta, y sin embargo proporciona una gran cantidad de proteínas.
Además, es fuente de proteínas, vitaminas del grupo del complejo B como la B1, B3, B5, B6, biotina, B12 y el ácido fólico y de minerales como el fósforo, el potasio, el magnesio, el hierro y el cinc.
Se puede preparar de diferentes y deliciosas maneras: para elaborar entrantes, con huevo hilado, en ensaladas…
Una delicia para toda la familia.